Higiene femenina

HIGIENE FEMENINA

Es fácil reflexionar de este tema desde mi perspectiva, puesto que soy mujer, y me he encontrado en esta situación en innumerables ocasiones cuando iba al instituto. Estoy completamente de acuerdo en que la pobreza menstrual afecta al fracaso escolar, especialmente durante la adolescencia que es cuando comenzamos con la menstruación y que, en muchas ocasiones, es un tema muy tabú. Principalmente influye porque, de un modo u otro, considero que se liga mucho a la autoestima. ¿Cuántas veces, como mujeres, nos hemos planteado que se estarán riendo de nosotras porque se nos ha manchado el pantalón? Y, como digo, especialmente durante la adolescencia, cuando todo se nos hace un mundo. Así mismo, muchas faltas a clase se producen a consecuencia de los dolores menstruales que, en la mayor parte de los casos, es visto como algo anormal porque, y cito textualmente alguno de los comentarios que he escuchado, ¿cómo es posible que no tengan ganas de hacer nada cuando tienen la regla?. Está claro que es un tema tabú que no hemos sabido manejar con normalidad, porque la menstruación es algo COMPLETAMENTE FISIOLÓGICO. Quizás, esa falta de autoestima y esa falta de empatía hacia algo que debería ser normal, hace que muchas niñas y adolescentes no quieran ir a la escuela o se sientan avergonzadas si manchan la silla porque no tienen productos o no son suficientes para evitarlo.

Me gustaría recalca que la menstruación en sí, es un tabú de enormes proporciones, incluso entre mujeres y especialmente, en algunas culturas. Los hombres ni si quiera suelen mostrar interés (algunos todavía se preguntan qué es la copa menstrual) y para muchas mujeres, hablar sobre ello, les da pudor. Es importante que se vea como algo normal en el ciclo vital de una mujer y no hacer sentir a nadie pensamientos negativos dirigidos a la menstruación.

Además, en mi centro y en todos los centros donde he impartido clase o donde he sido alumna, no hay ningún tipo de producto de higiene menstrual ofrecido por el propio centro. Si era necesario, siempre se pedía a otra compañera o a una profesora pero, ni de lejos, lo ofrecía el propio centro, probablemente porque también son productos muy caros. Con esta parte, me remito a la última pregunta. Los productos COVID han sido usados por TODA la población, mientras que los productos menstruales son solo utilizados por una PARTE de la población: las mujeres. Como este problema surge desde el momento de que es algo que no nos toca a todos, ese producto ya no se rebaja. Como esto, podríamos decir por qué una maquinilla de afeitar (más utilizada por hombres) es 5 veces más barata que un paquete de compresas.

Con todo esto, considero que hay algo que obviamente debemos cambiar y es que la menstruación es algo normal, es algo fisiológico, no debe ser un problema y se le debe dar una solución.